Las ventajas del sistema Scada en aplicaciones e industria
El sistema scada está revolucionando la industria 4.0 con sus rápida aplicación en procesos industriales y sus múltiples beneficios. Gracias a este sistema que explicaremos con más detalle a continuación, los procesos de software y hardware se gestionan y supervisan de una manera más eficiente en industrias que van desde aguas residuales, electricidad, siderurgia, sistemas de petróleo y gas o la industria química entre otras.
Qué es el sistema Scada
Un sistema SCADA (Supervisory Control And Data Acquisitio) es un sistema de control utilizado en una amplia gama de industrias que se ocupa de la supervisión y el control de procesos en tiempo real. El objetivo de esta monitorización de datos sirve para diagnosticar errores, gestionar la producción y mejorar los procesos de una empresa.
Cómo funciona el software en un sistema Scada
Para entender mejor el funcionamiento de Scada hay que irse a una de sus soluciones más eficientes. El sistema APS (Advanced Planning and Scheduling), una poderosa herramienta de software utilizada en la industria 4.0 y que ayuda a las empresas a planificar y programar sus operaciones de producción de forma eficiente.
Para poder aplicar estos sistemas en una empresa, existen compañías especializadas en la materia como Geprom que brindan soluciones de automatización industrial adaptadas a cada industria. Una solución ágil para llevar la transformación digital a industrias que han tenido un evolución más lenta.
Ventajas del sistema Scada
Para entender el potencial de un sistema SCADA en la industria 4.0 vamos a explicar algunas de las ventajas más importantes que se pueden encontrar a corto plazo. Por ejemplo, la monitorización en tiempo real, que permite a los trabajadores supervisar las operaciones de forma centralizada. Esto también conlleva otra ventaja importante, el control remoto de ciertos procesos, de forma que se puede llevar a cabo una intervención ágil sin necesidad de estar físicamente en el lugar controlando los procesos de forma asidua.
Además, todo esta monitorización en tiempo nos lleva a otro término, el Big Data. Y es que podemos recopilar un gran volumen de datos de los procesos industriales para analizar y optimizar. Esto puede traer consigo una reducción de costos importante a largo y mediano plazo.
Por otro lado, la optimización de procesos y la constante medición de datos puede alertar de funcionamientos anómalos y evitar errores en cadena con una respuesta rápida. A su vez, estos sistemas mejorar la seguridad al reducir la exposición de los operadores en entornos de cierto riesgo.
Por último, una gran ventaja a largo plazo de los sistemas SCADA es que son escalables. De forma que podemos aplicar mejoras a una determinada solución y luego integrar las mejoras a nivel global para mejorar los procesos. Y es que la escalabilidad es un factor determinante para la industria 4.0